Enfrente, el Lobo mendocino, comandado desde el banco por el ex-arquero Pozo, planteó un partido incómodo para La Banda, que nunca encontró el juego necesario para ser más punzante teniendo en cuenta un dominio de la pelota casi absoluto.
A los pocos minutos, Gallardo tuvo que mover el banco por la lesión de Ponzio, quien se había mandado una macana tremenda en el borde del área, salvada por Lux y la tímida definición del delantero rival. Adentro De La Cruz y Enzo, que se mandó la suya en el segundo tiempo, al lugar de Leo.
El partido continuó sin emociones hasta el descanso (y cuando digo sin emociones no me refiero solamente a los goles).
A la salida del complemento River arrancó con más energía, pero quedó desordenado atrás y a los trece minutos, en una contra, Angileri (de flojo partido) le comete penal a Lopez. Lux se disfrazó de Armani y con los pies y un poco de fortuna con el travesaño evitó que los mendocinos se impusieran en el marcador.
Marcelo tomó nota y mandó a la cancha al pibe Rollheiser en lugar de Alvarez. El debutante, luego del rebote en un remate de De La Cruz, le pegó de primera desde fuera del área y Palacios con un leve desvío de cabeza puso el 1-0 cuando promediaba la segunda parte.
Cuatro minutos tardó Gimnasia en empatarlo por medio de la cabeza de Renzo Vera y una floja respuesta de Lux.
El Millo siguió dominando hasta el final pero, sin inquietar mucho al 1 de Gimnasia, el partido se escurrió hacia la tanda de penales.
Con las 3 primeras tandas convertidas al 100%, Brian Andrada reventó el travesaño en el cuarto penal mendocino y Borré validó la ventaja millonaria. Gimnasia convirtió el quinto penal y si River hacía lo suyo, pasaba de fase.
Turno de Benjamin Rollheiser. Si, el debutante! Gallardo mandó al quinto penal, el que definía la serie, al pibe que estaba haciendo su presentación. Como todo lo que toca el DT se convierte en Oro, y le tocó la cabeza cuando le confió el último remate, el chico de 19 años la clavó de zurda en el ángulo superior izquierdo del arco de Marchiori.
River sufrió por demás para pasar de ronda ante un equipo humilde, aunque bastante sólido, que no supo aprovechar dos mano a mano y un penal a favor para lograr su milagro.
A una semana de enfrentar a Cruzeiro, el Millo se encaminó en otra Copa y ahora tendrá de vuelta a Armani, Casco, Scocco, Pratto y Suarez.
Arranca una nueva etapa y podemos ganar la triple corona. Campeonato, copa Argentina y Libertadores para un RIVER que te invita a soñar. Como dijo el Muñe "Que la gente crea porque tiene con qué creer!" y CÓMO NO VOY A CREER EN VOS NAPOLEÓN!
Abrazo Millo